Acerca
La necesidad que los hombres asuman su liderazgo espiritual en su rol en la iglesia y la familia fue la motivación para crear este programa. Hay una gran necesidad en los hombres de asesoramiento, estímulo y discipulado. Así mismo, como hombres entendemos que el rol que Dios nos dio al crearnos es de dirigir.
Ese deseo y mandato viene con la responsabilidad y el privilegio de proveer y proteger. Así que, una de las maneras más poderosas para motivarse mutuamente en el camino de la justicia es ser valientes y honestos con los demás y orar de la misma manera.